domingo, 21 de octubre de 2007

Salvación..

En algún momento de nuestra vida encontraremos un momento para reflexionar acerca del propósito de nuestras vidas en este mundo, pues tomarse un tiempo y pensar que nuestra vida solo se basa en nacer crecer, reproducir y morir no tendría sentido para toda esta magnifíca creación, en especial nosotros, que en todo lo que pensamos, en todo lo que somos tenemos un valor sin consideración..De eso se basa nuestra vida.. de poder darle a nuestro propósito loque se merece.. nuestro propósito es vivir para aquel que nos dió la vida, aquel que nos la puede quitar. Muchos conocesmo un suceso importante en la historia de la humanidad, de ello depende la Fé de todos, Jesús , el Hijo encarnado de Dios vino a ser uno de nosotros, a convivir con nosotros, a sentir como nosotros, 100% hombre, lloró, sufrió y sobre todo dió su vida por nosotros, y aún así no dejó de ser Dios.
Por que de tal manera amó Dios a este mundo que dio a su hijo unigéinto para que todo aquel en que él cree no se pierda mas tenga vida eterna. Jn 3:16

lunes, 15 de octubre de 2007

Historia Celular AGEUP Parte I

Hola queridos amigos..¡ pues ya despues de haber tenido unas buenas vacaciones para el blog.. sigo retomando..¡ pues ahora tb aportando un poco sobre la Historia de como se formaron las células dentro de los centros de educacion superior , donde AGEUP en su vida y Misión ah realizado hasta el momento..¡ pues aqui les dejo la primera parte de esta gran colección.

AGEUP: Historia Celular

“Porque donde están dos o tres congregados
en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”
Jesús de Nazareth



La célula cristiana es un modelo bíblico de misión que, en términos universales, ha experimentado el pueblo de Dios a través de su historia; y, en forma especial, es uno de los rasgos característicos misioneros de mayor importancia dentro de la obra estudiantil.

Tanto la AGEUP como la Comunidad Internacional de Estudiantes Evangélicos (CIEE), tienen una amplia historia misionera que necesita ser conocida y valorada por las nuevas generaciones de estudiantes. Desde el inicio de su trayecto histórico misionero, los movimientos estudiantiles, asumieron la práctica celular como un rasgo distintivo de la obra en los Centros de educación Superior.

Ya en 1976, cuando Samuel Escobar terminaba de escribir un tratado sobre los primeros treinta años de historia de la CIEE, él plantea en su texto algunas interrogantes pensando en el futuro. La última de ellas tenía que ver con la preocupación por la estrategia de misión:

"¿Cómo aprovechar mejor la experiencia y el rico bagaje de estos treinta años de labor,
en la construcción de una estrategia para el futuro?".

El mismo Samuel Escobar articula su respuesta. Y el dato más importante que constata, y que le hace pensar que la hora de Dios a llegado a América Latina, tiene que ver con el crecimiento de las células cristianas en el mundo estudiantil:

"El crecimiento espontáneo de células y grupos estudiantiles en algunos países hace pensar que el Kairós de Dios
para el ministerio de la Comunidad tal vez está empezando recién.
Una nueva etapa se abre.
¿Se lanzarán estos movimientos a la tarea
respondiendo al desafío de hoy? ".

Dos años después, se elaboró el antiguo Manual de la CIEE que recoge la experiencia de los estudiantes evangélicos de toda América Latina, en su esfuerzo por servir a Cristo en el mundo estudiantil. Este documento argumenta que la obra misionera de los estudiantes evangélicos ha contribuido a la iglesia redescubriendo elementos escriturales importantes, que se fueron diluyendo en el proceso histórico; como por ejemplo el trabajo celular:

"El cumplimiento de la misión en una "frontera" como puede calificarse al mundo estudiantil (frontera cultural y social), suele a veces ayudar a descubrir riquezas olvidadas de la fe y a responder creativamente en el desarrollo de métodos y formas de trabajo.

(...) las demandas de la vida estudiantil han llevado a redescubrir métodos olvidados de presencia y evangelización. Tal es el caso de los pequeños grupos de estudio bíblico y las células que fueron métodos de trabajo misionero redescubiertos en nuestro siglo en el mundo estudiantil y devueltos a la iglesia.

Como podemos darnos cuenta el trabajo celular en la obra estudiantil no es una moda pasajera que hemos asumido en estos últimos años. Las Células son parte de una herencia histórica de varias décadas que se ha vivenciado en nuestros movimientos estudiantiles en múltiples generaciones y en todo el mundo.

AGEUP
En nuestro Movimiento estudiantil, logramos distinguir tres periodos históricos que recogen nuestra comprensión y práctica celular. Ahora, te invitamos a reflexionar alrededor de algunas preguntas planteadas a partir de estas gestas:




1. UN MOVIMIENTO EMBRIONARIO. Década del 50



Desde un principio la obra misionera de la AGEUP asumió el trabajo celular como su práctica de acción, aún cuando todavía no había una articulación teórica sobre la estrategia celular. En 1955, Ruth Siemens comienza a reunirse en su casa para estudiar la Biblia y luego compartir el evangelio en la universidad. Esta fue una experiencia de trabajo celular. Samuel Escobar, en su artículo Prehistoria de la AGEUP, nos describe esto en los siguientes términos:

"...volví a visitar a Ruth. Y poco a poco fuí conociendo a los pequeños núcleos y las personas con quienes ella trabajaba noche tras noche, (...). Así conocí gente de otras iglesias evangélicas como Enrique Giraldo, Bill Aish, Aída Casildo y Bertha Díaz, a quienes Ruth había reclutado (...). Aída pronto invitó a sus compañeros y yo a los míos. En San Marcos teníamos un grupo de estudio literario y social (...). De ese grupo María Luisa Escobedo y Carlos García empezaron a asistir a uno de los grupos de estudio bíblico en casa de Ruth. Con el tiempo ambos hicieron profesión de fe en Jesucristo. Alrededor de la Palabra empezamos a desarrollar una amistad sólida y un compañerismo mutuo de apoyo y misión. El genio de Ruth fue entusiasmarnos y luego dejarnos actuar por cuenta propia. A diferencia de la mayoría de misioneros y pastores que conocíamos Ruth no se asustó ni de la militancia socialista de Carlos García ni de mi actuación en el Centro Federado de Educación y en la FUSM. (...) Así, de manera espontánea, el fermento que había empezado a existir tomó forma en lo que decidimos llamar CBU: Círculo Bíblico Universitario".

Aquí encontramos la prehistoria de la concepción y práctica de las células cristianas en la universidad. Esta experiencia de célula germinal son justamente "los pequeños núcleos" y "las personas" que Ruth Siemens organizó.

Por otro lado, René Castro, antiguo Secretario General de la AGEUP, en su novela Los Viejos Leones, plasma en forma literaria lo que fue la vivencia histórica de los pioneros de la obra estudiantil en el Perú. Allí nos dice algunas cosas sobre la vivencia celular de "los viejos leones" del Movimiento:


"Frans, quien había desviado la conversación anteriormente, volvió a insistir con la esperanza de lograr lo que quería.
e) Bueno Carlos, lleguemos a un acuerdo sobre la participación de tu movimiento en las elecciones
f) Creo que tienes una información muy exagerada sobre nuestro número, siendo realistas te diré que nuestro núcleo central está compuesto de unos treinta miembros- Contestó Carlos, mientras se acomodaba nuevamente sobre el mueble.
g) Pero ustedes reúnen masas cuando tienen una actuación especial en la universidad, por ejemplo, la vez que presentaron a ese conferencista que no me acuerdo bien de qué país era.
h) Carlos tuvo que explicarle -Cada miembro del núcleo central está en contacto con dos estudiantes de manera directa; aunque éstos no asistan a las reuniones regulares, sin embargo cooperan estrechamente con el movimiento.
i) ¿En que manera? _ preguntó inquisitivamente Frans.
j) Vender revistas, promueven reuniones en células que generalmente funcionan por zonas en la ciudad, lo hacen en casas particulares con uno o dos amigos más. De esta manera el grupo regular y visible de treinta es el que hace trabajar a ochenta o noventa estudiantes más."



"¿Cómo nació y sobrevivió -entonces- el grupo pionero? Carlos lo entendió mejor, a la luz de un pequeño folleto-documento, publicado años atrás por un anterior dirigente que tuvo la extraña cualidad de fijar sus pensamientos y preocupaciones -sobre el grupo- en pequeños ensayos, la inmensa mayoría de los cuales jamás salieron a luz, a excepción de éste bajo el título: "Mitos y metas de la obra estudiantil", en el cual explicaba la supervivencia del grupo, porque había algo que las sociedades tecnócratas van borrando: sacrificio. El grupo pervivió sin tener grandes oradores ni conferencias de alto contenido académico; sino a base de células de estudio bíblico. Carlos sentía un leve y frío recorrido zigzagueante por la región cervical de sus vértebras, cuando pensaba que el grupo actual, a pesar de seguir conformado por jóvenes provenientes de la misma clase -salvo excepciones- sin embargo no tenían mucho sacrificio; y Carlos se crispaba más cuando notó que los estudios bíblicos habían caído en cierto desuso. Temía por el futuro del grupo, temía que la imagen que él tenía del mismo, se haga grotesca..."

¿Cuáles son las características distintivas que encontramos en esta primera experiencia de trabajo celular de la AGEUP?
¿Cuáles son los retos o desafíos, que esta primera experiencia de trabajo celular, nos plantea para el día de hoy?